Bienvenidos a la portada
El Sr. Pablo Calero, en el recinto Juan Montalvo del recinto Shushuqui, refiere estar contaminado desde 1986 (30 años) por medio de piscinas de aguas de formación. Con una de ellas sufrió pérdidas de 15 cabezas de ganado. En la actualidad ya ha dejado de tenerlo porque todo se le muere. En la inspección realizada con la DPE en 2011, los ingenieros de Petroecuador manifestaron que esa finca “no existe en el inventario de los pasivos ambientales en el sector”, a pesar de haber presentado 14 denuncias dirigidas a Petroproducción, DPE, Asambleistas, Municipio, Corte Superior de Justicia, Junta Parroquial de Pacayacu. Ha perdido ganado, chancos, gallinas, pero sobre todo familia que han desarrollado cáncer. Hasta el momento no ha recibido ni respuestas ni apoyos.
Le contaminaron la finca, cerca de la estación Secoya, desde 1990 con una piscina de 50x50m donde eliminaban además los desechos de un mechero y una segunda piscina que intentaron remediar pero que la empresa argumentó división entre los trabajadores de la comunidad para no seguir con la limpieza. La visita de la DPE en el 2011 comprobó la contaminación del estero y que ya no pueden tener ganado porque todo se moría con ese agua. En la visita del 2015 Petroecuador había puesto una puerta para impedir el acceso al lugar, pero la contaminación tenía el mismo rostro. HASTA EL DÍA DE HOY, MÁS DE 26 AÑOS DESPUÉS, PETROAMAZONAS SIGUE SIN DAR SOLUCIÓN A SU DEMANDA.