El 12 de abril de 2011 el Sr. Pinargote denunciaba ante la Defensoría del Pueblo del Ecuador que sus aguas estaban contaminadas por la actividad petrolera de Petroproducción. En su finca hay dos piscinas de la estación Pichincha y un pozo de reinyección de agua que han contaminado el agua de consumo y le han hecho perder gallinas, caballos, chanchos, perros y patos. En la visita de la DPE del 2011 se reconoce que “el Sr. Pinargote abandonó su finca porque no soporta los olores y porque ya no es posible cultivar”. La empresa reconoció que su pasivo ambiental está inventariado, pero no tiene fecha de remediación, mientras la DPE verificó la emanación de olores a químicos. HASTA EL DÍA DE HOY, MÁS DE 13 AÑOS DESPUÉS, PETROAMAZONAS SIGUE SIN DAR RESPUESTAS.